Son las 15:25 horas del 4 de enero de 2013 y después de unos días de preparar mudanza y despedirnos de los familiares amigos, partimos definitivamente a nuestra aventura Peruana. Estamos subidos en el tren, esperando a que parta y nuestra familia y unos pocos amigos nos despiden en el anden. Las emociones son muy muy intensas.
Es difícil de explicar los sentimientos y sensaciones que uno tiene cuando parte, y no cuando parte para unas vacaciones o un viaje de negocios, si no cuando parte para descubrir un nuevo mundo, para dejar atrás a la familia y a los buenos amigos.....
Creo que no merece la pena darle muchas vueltas a la pena que siento en este momento, y al mismo tiempo las ganas que tengo de llegar a Lima para hacer allí mi nueva vida. Lo que en mi caso si que puedo decir es que si no fuera por esta marcha, no hubiera descubierto una gran cantidad de sentimientos y emociones que corrían dentro de mi.
También puedo decir gracias a este viaje, que tengo la compañera perfecta para mi vida, ya que si no fuera así, estoy seguro que no hubiera sido capaz de comenzar este viaje.
Por lo demás, está claro que cuando algo termina, siempre es el comienzo de alguna otra cosa y en nuestro caso, espero que sea el momento de una maravillosa experiencia.
Solo puedo decir, que si os encontráis en una situación similar, en la medida de lo posible, disfrutar del momento y de las sensaciones y no os dejes llevar por la pena, si no por la esperanza del regreso.
En el tren camino de Madrid el 4 de enero de 2013.
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